Una vieja Receta

Cuando te encuentres un poco triste, con la cabeza abajo, cansada de la vida y sientas enormes ganas de llorar, no dejes que nada ni nadie te logre abatir. Eleva tu mirada al cielo y ve cuan perfecto es. Si al mirar a lo alto el sol te vence hasta hacer escapar tus pensamientos y sientes resbalar por tus mejillas lagrimas de angustia no dudes en recogerlas una a una, buscar una hoja de un frondoso árbol y todas las lágrimas derramadas guárdalas en ella durante una noche, luego sácalas en la mañana al sol veras que muy pronto desaparecerá el charquito casi sin darte cuenta y en una nube llena de magia se transformara para dejar caer una delicada lluvia de notas musicales y corazones sobre tu cabeza y todo tu cuerpo para recordarte que estas hecha para Vivir, cantar, amar, reír porque aun bajo la tormenta mas intensa puedes mojarte de dicha y ser la persona más feliz.

Angel

Un ángel sin alas travieso y humilde caminando bajo el frio espantoso de la noche en la ciudad, observa a los hombres  junto al resto del mundo sufriendo por cada cosa… mientras el suspira y sigue su camino con sus pies descalzos, no cuenta con ropas, lleva consigo  hambre, en sus bolsillos ni  una sola  miga de pan, llenos de miedo caminan a su lado quienes le pudieran salvar del egoísta mundo de la indiferencia que lo ha vuelto invisible, su mirada apagada y vacía  de tanto buscar la esperanza que un dia  perdio en alguna caneca de cualquier lugar.

Soñador que ha perdido la risa, Mente repleta de  talento que se apago, niño tierno que un día a la fuerza en un hombre convirtieron y ahora estando tan solo nadie se acuerda de él, sufre en silencio bajo el mismo cielo que gozamos  cada despertar tú y yo,   nadie se acuerda de el tan solo porque un día perdió sus alas  y no pudo volver a volar.

ORACIÓN DE AMOR

Te pido que seas paciente, escúchame entre sueños, protégeme de la indiferencia, ayúdame a entender lo lógico, perdona mis faltas de ternura y  mis silencios.

No dejes que mueran los detalles, ni  la idea   de  alcanzar un futuro, no apartes de mí  su dulce compañía.

Gracias te doy por  el dulce almíbar de  su boca, por los sueños que me hacen volar hasta encontrarla.

Santo amor que habitas en cada rincón, en cada espacio líbrame de la desconfianza, alimenta mi soñar, inunda con tu magia mi cuerpo como también  mi cerebro, hazme quererla  de noche y de día, que mi único deseo sea despertar junto a su almohada cada mañana.

Déjame consentir su cabello  cada noche, ilumíname con su mirar,  conviértela en  mi único silencio, en mi único canto, en el mejor suspiro y en mi más repetida oración Amen.