EL SINDROME DEL HAMBRE

Es el hambre acaso el mal  que mas daño hace...

Suena un timbre...es hora de almuerzo y no se justifica abrir la puerta para  retrasar el hambre que no da espera, es casi obvio que perdería unos cuantos minutos mas...

Una tarde como todas un poco de frio y lluvia me encontraba solo en la escuela de artes  lugar donde laboraba  hacia ya unos meses ,sentado en la silla del gerente, degustando un delicioso café , tal ves queriendo sentir ese aire de grandeza y poder... eran unos minutos de agradable placer , llaman a la puerta de una manera escandalosa cae una suave brisa y es hora de tomar mi primera decisión como gerente suplente de la escuela, aunque la verdad  en la escuela de artes yo  era un estudiante mas y  era el chico de los tintos.. Bajo los dos pisos del edificio para abrir la puerta, ella ingresa casi empapada, me sonríe, luego me regaña la muy consentida porque por mi culpa se estaba mojando, deberías comprar un paraguas le conteste de manera muy formal, la invite a seguir, le acomode en la sala  de espera, le ofrecí un toalla de papel para que secara mientras le preparaba un café y calentaba nuevamente el mío…me senté justo en frente… para no intimidarla sentándome mas cerca, ella no quitaba su mirada de mi y yo me deleitaba contándole las maravillas que se aprenden en la escuela, los bajos costos, los amigos que se pueden conseguir, de pronto ella avanzo un poco hacia la silla continua a la mía me tomo la mano para decirme que aun tenia frio...y así era se me congelo la sangre y la lengua porque me quede sin palabras, y quien no una mujer extraña, no la conoces, podría ser peligroso...mas yo de terco apreté sus manos ella se levanto de inmediato, nuevamente me clavo su mirada y me pidió que le enseñara los lugares de la escuela...yo con desconfianza aun procuraba ir  detrás  o a su lado, mis ojos fijos mirando su bolso en caso de un arma...y al lado de su bolso una linda figura de mujer...bien la verdad el miedo se me paso pronto y tome una decisión riesgosa me le acerque y le he robado el mas dulce beso azucarado, y no fue uno ni fueron dos, fueron muchos....luego hicimos una pausa a causa de un ruido extraño en mi pansa...fue allí donde aproveche para invitarla a salir y comer algo pues la verdad muy temprano y sin desayuno había salido de casa pero ella insistió en que no quería salir  volvimos a la sala,  el reloj camina en puntas para no distraernos hablamos mmmm bueno hable y hable de muchas cosas bonitas de la escuela y de las mismas tonterías que siempre hablan dos que no se conocen, etc,etc. en fin 5 de la tarde y ella seguía encantándome con su mirada y sus besos ...fue justo en el beso numero 164 cuando sonó el timbre nuevamente, ambos nos sobresaltamos … claro los estudiantes ya empezaban a llegar baje a la puerta con un poco de sonrojo y pena como si estuviera haciendo algo malo…eran mis compañeros de clase y una ex novia subieron rápidamente la idea era que venían a preparar una exposición de historia del arte..les presente a la chica bonita diciéndoles que era de una ONG y venia a aprender un poco de arte…ella me miro y sonrió como al principio …y con toda la propiedad del caso afronto a mis amigos y les hablo sobre algo demasiado importante, las ayudas para los niños que mueren a causas del hambre en el mundo, la verdad no sabia de donde saca tantas historias, pero lo que decía calaba en mi muy fuerte…yo con los deseos mas inmensos de correr por una pizza o hamburguesa , ella hablando del sufrimiento, la miseria y el hambre eran las 6 de la tarde ellos encantados de conocer esas historias lejanas de tierras cercanas y yo aburrido, no volvió a mirarme, no hubo mas besos después de que  ellos llegaron, mi ex novia me acosaba sutilmente tocando mi espalda y acercándoseme a mi hombro a pesar de que ya me había corrido casi un metro.

El hambre ya era barbará, deseaba con anhelos locos salir a buscar un pastel o trozo de pan dulce…algo par mitigar mi  hambre entendía profundamente el dolor de los seres de quien refería la niña bonita  que por cierto no sabia su nombre. 

Suena el timbre por tercera vez y es el profesor de bella artes, un tipo gordo, narizon, de ojos saltones  y de  cabello semi largo, unas cuantas carpetas y unos viejos libros,  saluda a toda la concurrencia se me acerco me pidió un tinto, y sacando del bolsillo de su chaqueta  me compartió un delicioso pastel, que me devolvió la vida, el amor, los sueños.  Era el héroe de la noche  le tomaría una foto, la llevaría en mi billetera en agradecimiento…los héroes si existen me decía, Preparando estaba el café cuando el profesor reía a carcajadas y les presentaba a Joyce su bonita y joven esposa, yo entre con el café en mis manos, observe a la bonita mujer casi como en cámara lenta… por fin sabia su nombre la mire con ojos saltones, temblando y una sonrisa loca y de nervios hizo que regara el café sobre mis ropas para que todos terminaran de sonreír a carcajadas.

No hubo mas remedio que secarme ingresar a clase y una vez se fueron todos me tome el ultimo café de la noche junto al pastel que me regalo mi profe.

Y lo he dicho y lo mantengo....Amor con hambre ni nace, ni florece, ni crece..